lunes, 30 de noviembre de 2009

Al fin, tras el ruido...

Calló, y tras el silencio, de nuevo el mismo insoportable ruido por el que calló tras hablar.
Habló, y de nuevo callaron, el contenido no era más que una solución temporal para acallar el ruido.
Pensó, dejó de hablar, y callado inició un viaje entre ese ruido.
Actuó, comprendió que el ruido era más liviano cuando hay música de fondo.
Dejó de escuchar a los demás, solo música.